No debería sorprendernos cuando hablamos de arrugas, que el mayor culpable de las mismas sea la exposición al sol. Tanto los rayos UVA, que penetran en las capas más profundas de la piel, como los rayos UVB, que causan quemaduras solares, pueden provocar un envejecimiento prematuro y arrugas. Nuestra recomendación es que te mantengas alejado del sol no sólo para protegerte del cáncer de piel, sino también para lucir una piel más joven. Y sin no puedes evitar estar en el sol, usa cremas de protección solar de SPF 30 diariamente.